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entrada de charligreus a las
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jueves, mayo 18, 2023
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3 comentarios:
He perdido amigos por la opinión política. Evidentemente, por pensar diferente. Tengo mi propia idea política, mientras pienso que las soluciones tanto personales como colectivas no están al alcance de ninguna idea política. En el mundo de “ la cultura” ser de izquierdas es casi obligado. La izquierda crea cultura , es moralmente superior y un artista debe tener una idea del mundo alineada con la izquierda. Desde que tuve contacto con anarquistas, socialistas, maoistas , comunistas del pce etc etc en la facultad , entendí entre otras cosas que la izquierda y yo éramos opuestos por un simple principio de libertad personal para empezar. A mi me gustaba Woodstock no París 68. Me gustaba Hendrix , no Atahualpa Yupanqui y todo el mundo que me ofrecían mis compañeros marxistas me parecía , oscuro, rancio, pasado Y tendente a la falta de libertad personal. Se trata del estado como padre supremo. Su superioridad cultural era mentira, es una gran mentira que perdura. Nuestro atraso cultural les incluía a todos ellos. Era la lucha de los dos bandos y yo necesitaba otra historia , otro aire, y otra banda sonora. La mía no era la canción de Paco Ibañez con la bandera roja gritando libertad, porque eso nunca ni trajo ni llevó ninguna libertad. No ser rojo no me convierte en lo contrario. No soy de izquierdas , no lo soy, simplemente no. Perder amigos por estas cuestiones me parece impropio de la inteligencia. Siento haber elegido mal. A veces pienso en alguno de ellos y me parece patético. Hay siempre algo de odio guardado dentro de esa actitud. Es odio y es por otras razones mucho más profundas. Razones personales que guardan dentro.
Conocí a un guitarrista que no entendía que el siendo tan rojo y yo tan poco, pudiera tocar mucho peor que yo. Bueno, visto al revés que es como volver a ver lo mismo, no entendía porqué un tipo que no es rojo, puede tocar mejor que un auténtico marxista. Nunca hice ni medio alarde de nada. Primero porque soy muy muy consciente de mis enormes limitaciones y muy muy consciente de las suyas aún mayores. Al más débil le tiendes la mano siempre. No entendió, y sigue sin hacerlo, que la cosa no estaba en eso y que justo por estar en otro lugar del interior , que es lo que llamamos talento, no era cuestión de perder el tiempo.
Hablamos de respeto, empatía, libertad, diversidad.....poco de ésto existe cuando se trata de política o religión. Yo, soy de izquierdas, mi marido más bien no, y jamás tuvimos problemas. Supimos respetarnos, e incluso voy más lejos, a pesar de no estar de acuerdo en muchas cosas, las conversaciones respecto a política, eran interesantes y nunca nos supuso un problema, nos enriquecía y crecía el respeto del uno con el otro, ninguno imponía nada al otro. Respeto y escuchar, poco más se necesita....
Y mucho AMOR.
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